La renovación de la gubernatura, diputaciones y alcaldías en Zacatecas se desarrolla al ritmo del monrealismo, clan que tiene el control total de Morena “como si fuera una franquicia”, aseguran el senador José Narro Céspedes y el alcalde de Zacatecas con licencia Ulises Mejía Haro.
La renovación de la gubernatura, diputaciones y alcaldías en Zacatecas se desarrolla al ritmo del monrealismo, clan que tiene el control total de Morena “como si fuera una franquicia”, aseguran el senador José Narro Céspedes y el alcalde de Zacatecas con licencia Ulises Mejía Haro. En entrevista, ambos denuncian que fueron sacados a la mala de sus aspiraciones políticas y cuestionan la candidatura de David Monreal, personaje ligado a divisiones internas y a escándalos, el más reciente por tocamientos a una mujer.
Zacatecas (proceso).- Con dos derrotas al hilo como aspirante a la gubernatura y un lema de campaña que sostiene que “la tercera es la vencida”, David Monreal Ávila reconoce que en este trayecto político sólo obedece a dos liderazgos por igual.
“Sólo he obedecido a estos liderazgos y sólo he estado bajo dirección de Andrés Manuel (López Obrador) y Ricardo Monreal (su hermano), que ha sido el guía del movimiento, del monrealismo… y del lopezobradorismo con el licenciado Andrés Manuel.”
En ese contexto la renovación de la gubernatura de Zacatecas, de los 58 ayuntamientos y 30 diputaciones locales se desarrolla una vez más al ritmo del monrealismo, tal y como ocurre prácticamente desde 1998, cuando Ricardo se encumbró como gobernador, ignorado por el PRI y recibido por el PRD y por López Obrador.
–¿El monrealismo está apuntalando un proyecto de sucesión presidencial para 2024, como muchos lo advierten?
–He estado ocupado acá en la lucha democrática de nuestro estado, pero lo que sí te puedo decir es que hay una gran simpatía de muchos actores políticos estatales y nacionales con la causa, con la lucha y con el movimiento.
Sin embargo, el antagonista de David Monreal en Morena, el senador José Narro Céspedes –actual compañero de Ricardo Monreal en la bancada– define el movimiento monrealista como “un cacicazgo político”. Muestra de ello, ha dicho, “ellos pusieron todos los candidatos del partido en todo el estado, presidentes municipales y diputados locales”.
Narro Céspedes fue uno de los aspirantes a la candidatura al gobierno del estado que se quedó en el camino frente al monrealismo, y también fue parte del grupo que impugnó ante el partido y los tribunales electorales la postulación de David.
El alegato central de la demanda es que la nominación se definió por la Comisión Nacional de Elecciones de Morena mediante una encuesta telefónica que no fue mostrada a los aspirantes.
“Es un problema de intereses, de interés en el proyecto de Zacatecas, de la Cuarta Transformación de los zacatecanos, de poner por encima el interés de una familia, de un grupo que es el que quiere opinar y usar a Zacatecas para sus intereses”, sostiene Narro.
Asimismo acusa al presidente nacional de Morena, Mario Delgado, de entregar a los Monreal el control del partido en la entidad.
“Pareciera que les dieron una concesión. ‘Tú pagaste y tú pones los candidatos, tú vas a iniciar la campaña, tú vas a garantizar que se gane, es tu tarea y es tu responsabilidad y tú tienes la franquicia’.”