Los dos cuerpos que fueron colgados el pasado 26 de enero en un puente vehicular de la vía federal número 45, en Ciudad Cuauhtémoc, Zacatecas, correspondían a efectivos activos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Los dos militares eran originarios de la comunidad de San Pedro Coyutla, municipio de Chalma, en el estado Veracruz, y se encontraban asignados en Zacatecas, donde realizaban su trabajo en el combate al narcotráfico, precisaron fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública a La Jornada.
Los cuerpos de ambos elementos, identificados como Gabriel “N” y Luis Ángel “N”, ya fueron entregados a sus familiares en Veracruz. Según las primeras versiones, fueron secuestrados por miembros de la delincuencia organizada cuando se encontraban en su día de descanso.
Los cadáveres fueron abandonados durante las primeras horas del pasado miércoles. Los cuerpos estaban semidesnudos y con signos de tortura. El pasado 18 de noviembre, en ese mismo sitio fueron colgados diez cuerpos en un puente vehicular. Sus muertes se suman a las de al menos otros 19 militares veracruzanos que han caído en cumplimiento de su deber tanto en la entidad como en otros estados desde 2010.
En Zacatecas ya son tres militares activos ejecutados durante el mes de enero. El otro militar, era un integrante de la Guardia Nacional, que también fue previamente privado de su libertad y luego apareció el 20 de enero ejecutado y envuelto en cobijas en la comunidad de Picones, en la capital de Zacatecas. Asimismo, el estado acumula 13 personas asesinadas con nexos en las dependencias de Seguridad del estado en menos de un mes, la cifra más alta a nivel nacional.
Durante 2021, Zacatecas se ubicó en tercer lugar por efectivos policiales ejecutados con 36 casos, un aumento cuadriplicado respecto a 2020, cuando solo fueron ocho, según datos de la organización Causa en Común.
El estado de Zacatecas es un territorio en disputa entre varias organizaciones del narcotráfico, como el CJNG, Cártel de Sinaloa o del Noreste. Este combate por el control de la plaza ha generado un ambiente de inseguridad que siembra terror entre los habitantes, quienes a diario escuchan detonaciones o saben sobre algún inocente asesinado.
Cabe recordar que el pasado 25 de noviembre, el gobierno federal confirmó el despliegue de 3 mil 800 agentes para hacerle frente al crimen organizado en la entidad. Sin embargo, parece que la batalla no cede en el territorio y cada vez se intensifica más y se vuelve más violenta.
Zacatecas se convirtió en un escenario más de la disputa que mantienen el Cártel de Sinaloa contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el país desde mediados de 2020, pero esa lucha ya se veía venir un año antes, porque el estado es fundamental en el narcotráfico.
El estado es atravesado por dos importantes vías, incluido un tramo de la Autopista Panamericana, que conecta a Centroamérica con la frontera con Estados Unidos, y la Carretera Federal 54, nexo de Colima, sede de Manzanillo, el puerto con mayor tráfico de México, y la frontera estadounidense con Coahuila, Tamaulipas y Nuevo León.
Los informes federales registraron aumentos mensuales en los asesinatos que pasaron de ochenta o noventa a una centena o 120 cada 30 días en 2021. En 11 meses ya había mil 50 homicidios dolosos, de acuerdo con el Secretariado de Seguridad, pero el Ejército contó mil 277 casos hasta el 24 de noviembre pasado y estimaba mil 447 víctimas en todo el año.