De acuerdo con la octava edición del Índice de Paz en México (IPM), Zacatecas es el estado que ha sufrido el mayor deterioro de paz a nivel nacional, pues de estar en el puesto 13 en 2015 cayó al 30 en 2020, lo que revela la situación de inseguridad de años recientes y al alza de delitos con violencia.
El reporte, elaborado por el Instituto para la Economía de la Paz, expuso que la calificación para la entidad disminuyó 91 por ciento en la última medición, lo que se debió principalmente al incremento de crímenes de la delincuencia organizada, que a su vez afectó las cifras de homicidios y delitos cometidos con arma de fuego.
“Los homicidios aumentaron en 65.5 por ciento, el mayor aumento en el país, mientras que los homicidios con arma de fuego aumentaron en 78.3 por ciento, el segundo mayor aumento”, advirtió el estudio; además, se cita que la propia Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal estima que 90 por ciento de los asesinatos registrados se relacionan con el crimen organizado.
El IPM explicó que el territorio zacatecano es el punto de acceso para la actividad delincuencial de al menos cinco organizaciones de la droga. “Mientras el cártel del Golfo, el del Noreste y los Talibanes operan en el estado desde hace tiempo, el de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación han ingresado recientemente”.
De este último, precisó, “anunció su ingreso a más de una docena de nuevos municipios en el estado con una serie de ‘narcomantas’ […] durante el periodo inicial de la cuarentena por COVID-10”.
Según el informe, esta pugna parece estar relacionada con la expansión del comercio de fentanilo. Al subrayar que las incautaciones de esta sustancia se dispararon 486 por ciento en México durante 2020, el IPM señaló que Zacatecas se ha convertido en “un importante centro de distribución de la droga”, con carreteras que conectan con Estados Unidos al norte y con Colima al este.
Zacatecas también destacó como la entidad que más ha padecido el impacto económico de la violencia en el país, pues los costos de la delincuencia se calcula que ascendieron hasta 44.1 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del estado, equivalente a 96.6 mil millones de pesos.
Esto se traduce en que el impacto económico de la violencia per cápita es de 57 mil 953 pesos; en el último año, el estado tuvo el mayor aumento de estos costos a nivel nacional, con 30.5 por ciento más, y en los últimos cinco años el incremento acumulado es de 114 por ciento.
En contraste, a nivel nacional se reportó que la paz mejoró 3.5 por ciento, pues 22 estados registraron avances por reducción de delitos con violencia. Quintana Roo, Ciudad de México, Guerrero, Tabasco y Campeche resaltaron en comparación con 2019; por otro lado, 10 entidades registraron deterioro, sobre todo Zacatecas, San Luis Potosí, Sonora, Guanajuato y Michoacán.