Combinar algo que se sabe con algo que se tiene: así podría explicarse la autenticación de dos factores (2FA). Actualmente, Google anima a sus usuarios a activar un segundo paso además de la contraseña personal con la que tienen protegida su cuenta.
A principios de mes, la empresa había anunciado que llevaría la autenticación 2FA a más de 150 millones de cuentas de usuarios antes de finales de año.
¿Cómo funciona en la práctica la autenticación de dos factores? Tras introducir la contraseña para iniciar sesión en un servicio de Google, por ejemplo, en un ordenador portátil, los usuarios reciben en su teléfono móvil un mensaje en el que deberán confirmar que están iniciando sesión en el ordenador.
Para utilizar la función, los usuarios de iOS deben tener instalada la aplicación de Gmail. Los usuarios de Android no necesitan descargar la aplicación.
La activación de la autenticación de dos factores no se produce sin el conocimiento de los usuarios. Google envía primero un correo electrónico en el que se indica que el 2FA ya está configurado.
Si no se desea utilizar este mecanismo, se puede desactivar la autenticación en la configuración de seguridad. Para ello, basta con hacer clic en “Seguridad” y desactivar la “Confirmación en dos pasos” en el apartado “Acceso a Google”. En este caso, el inicio de sesión seguirá funcionando sin la doble protección.
“Nadie está obligado a hacerlo”, asevera el director de Productos de Google, Jeroen Kemperman, acotando que la autenticación de dos factores es la mejor defensa contra el robo de datos. “Es gratis y sencilla. Los piratas informáticos necesitarían un teléfono móvil y una contraseña para entrar en las cuentas de otras personas, lo que es un obstáculo mucho mayor”.
Fuente: Infobae